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Cacao, Theobroma cacao, es el fruto o mazorca de un árbol tropical perteneciente a la familia botánica Sterculaceae, originario de la zona del río Amazonas que puede medir entre 4 y 8 metros de altura. Actualmente el cultivo del cacao se desarrolla en más de 60 países, siendo África el mayor productor del mundo de cacao, seguido de Asia y por último América.
Los cacaotales, cultivos de cacao, se benefician de ser cultivados junto a otras plantas y árboles, es decir, que si creamos diversidad en la huerta será muy favorable para el cultivo del cacaotero y su rendimiento. Por eso es importante priorizar el policultivo frente al monocultivo.
Principalmente hay 3 variedades de cacaoteros: el criollo, el forastero (el más cultivado, con mayor resistencia a plagas y enfermedades) y el trinitario.
Vamos a conocer algunos datos importantes a la hora de cultivar cacao ecológico u orgánico.
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Cómo cultivar cacao ecológico
Siembra: podemos comenzar cultivando cacao mediante la siembra de semillas o a partir de injertos. Los plantones se preparan de abril a mayo y de julio a octubre. El segundo método es el más utilizado porque ofrece mejores resultados. Ten en cuenta que se debe dejar una distancia aproximada de entre 1.5 a 2 metros entre árbol y árbol de cacao.
Suelo para el cultivo del cacao: previo al cultivo se puede incorporar al suelo o tierra cal para eliminar posibles plagas o enfermedades que vayan a surgir una vez estemos cultivando el cacao. La cal además aportará minerales al sustrato. También podemos usar ceniza en lugar de cal. El cacaotal requiere de suelos profundos (las raíces pueden medir fácilmente metro y medio), con pH entre 5.5 y 7.5, ricos en materia orgánica, con buen drenaje, sin piedras ni terrones de tierra que puedan entorpecer el desarrollo de las raíces y que no sean extremos: ni muy arcillosos ni muy arenosos.
Temperatura para el cacaotero: la temperatura óptima para el cultivo del cacao es de 20 a 30ºC. A menos de 20 ºC hay problemas en la formación de las flores y éstas no aparecen o se caen.
Clima: los cacaotales crecen muy bien en zonas con climas templados a cálidos con una humedad entorno al 80%. Debemos ubicar los cacaotales en un lugar sin vientos fuertes, porque son especialmente vulnerables durante las primeras etapas del crecimiento.
Luz: Durante la germinación y el crecimiento de la plántula, mantendremos el cacaotal en semisombra o sombra parcial, porque estar a pleno sol no le viene bien. Una vez lo hemos trasplantado a su lugar definitivo, el cacaotal necesita ser cultivado en una ubicación que no reciba luz directa y que disponga de exposición limitada a la luz solar. Por lo tanto, el cultivo del cacao se puede beneficiar al cultivarse junto con otros árboles de mayor porte que le provean de sombra.
Riego de los cacaotales: es un cultivo exigente en cuanto a los requerimientos de agua. Prácticamente todos los días requiere de riego. Se recomienda usar el riego por goteo para optimizar el uso de agua para que este cultivo sea más sostenible o sustentable.
Poda del cacaotero: es una labor favorable a lo largo de la vida del árbol del cacao eliminar los chupones y las ramas que no se encuentren en buen estado o sean innecesarias. Otros beneficios de las podas es que mejoramos el acceso de la luz a todo el árbol, favorece la floración y formación de los frutos y la aireación.
Mulch, mantillo o acolchado: el árbol del cacao requiere de muchos riegos y humedad. Con el acolchado favorecemos la retención de la humedad del suelo y su fertilidad. Es una práctica muy recomendada en este cultivo. Además podemos usar plantas de cobertura o rastreras para este fin. Lee más sobre esta práctica aquí.
Manejo ecológico de plagas y enfermedades del cacao: para prevenir enfermedades y plagas es imprescindible poner en práctica las rotaciones y asociaciones de cultivos, que son muy importantes en toda huerta agroecológica. Planificar estos datos nos ayudará a prevenir. Pero si surgen plagas o enfermedades, las más comunes son la moniliasis del cacao y mazorca negra (ambas enfermedades producidas por hongos) que afectan a las mazorcas del cacao, plagas de hormigas, gusanos, escarabajos y áfidos como los pulgones. Podemos prevenirlas y combatirlas con estos consejos.
Cosecha de las mazorcas de cacao: un cacaotero adulto puede producir entre 40 y 60 mazorcas al año, que se recogen en dos cosechas a lo largo del año. Los frutos cambian de verde a amarillo anaranjado o incluso rojizo y pueden llegar a alcanzar los 30 centímetros de largo y 10 de ancho. Los cacaoteros empiezan a producir mazorcas a partir de los 5 años. Los granos o habas de cacao se encuentran en el interior protegidos por una pulpa blanca. Una vez las habas o granos se fermentan y se secan (en la foto), ya están listas para prepararse para el consumo.
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