Varinás tiene una particularidad: es fino chocolate artesanal infusionado con tabaco, que le da un carácter decididamente untuoso, sin llegar a ser invasivo.Por idea de Carlos Lander, fanático e impulsor de la cultura del tabaco en Venezuela desde 1992, y por hechura de los maestros de Cacao de Origen, se creó esta nueva marca de chocolate artesanal venezolano, Varinás.
Su cuerpo es de cacao Macuare al 60% de pureza, cepa que se adapta más dócilmente a otros sabores. Las tabletas han sido realizadas con el método bean to bar. Y viene en cuatro sabores: tradicional, ají dulce, sal de Araya y naranja cajera.
La intención de Varinás es rescatar los sabores venezolanos. Y por eso cada tipo de tableta tiene su particularidad, que Carlos Lander resaltó con entusiasmo durante el bautizo de la marca, realizado esta misma semana y a la que asistieron, además, el sommelier José Gregorio Pereira, el maestro chocolatero de Cacao de Origen, Diego Ceballos, y el director de Cacao de Origen, Bernardo Machado.
Con genética venezolana El nombre Varinás refiere a la época de la Capitanía General -cuando no existían reglas ortográficas y Barinas solía escribirse Varinás- y a un extraordinario tabaco que se sembraba en el piedemonte barinés y que desapareció.
Para definir los sabores definitivos que ofrecería la marca Varinás, el equipo hizo "toneladas de pruebas". En ocasiones, las mezclas comunes, como vainilla o sarrapia, no funcionaban. Es de considerar que se trata de un chocolate infusionado en cacao, lo que le da características distintas a cualquier otro. Al final, tanto los maestros chocolateros como los artífices de la marca se decantaron por cuatro sabores definitivos: tradicional, ají dulce, naranja cajera y sal.
En el tradicional, la infusión de tabaco le da carácter distinto y lo hace un chocolate fuera de lo común. Sin embargo, el tabaco no se percibe de forma invasiva, y aparece después de un rato de dejar disolver el chocolate en boca. La elección del ají dulce se remonta al origen del chocolate. "El ADN del cacao ha demostrado que es venezolano pero el chocolate, o lo primero que se pareció a eso, es mexicano. Los aztecas tomaban una bebida, llamada txocolat , con cacao y ají picante. La versión nuestra es el ají dulce. que le otorga notas especiadas y profundidad de aroma", dice Carlos Lander.
La manera de preparar esta tableta fue infusionando el cacao con tabaco y añadiendo el ají a la mezcla. Aunque es de la especie dulce, puede que se escape algún picor, debido a la polinización. El de naranja se relaciona con la infancia de Lander, que es la de muchos venezolanos: "Mi abuela preparaba un dulce de naranja cajera, y esa especie de cítrico era la misma con la que mi papá marinaba las carnes", refiere. Para incorporarlas a los chocolates Varinás se escogió el método de infusión.
El cuarto sabor es sal de Araya. Los cristales de sal llegan directamente de las salinas de Araya, las más importantes de Venezuela. Fueron recogidos a mano. Con la incorporación de la sal se potencian todos los sabores y aromas del chocolate tradicional. Aunque los cuatro sabores de Varinás llevan la misma base de cacao Macuare e infusión de tabaco, cada uno es completamente distinto a otro, pero todos mantienen esa larga persistencia en boca que sólo la deja el cacao venezolano.
Como buen chocolate artesanal, esta primera producción de Varinás ha sido muy limitada. Viene en tabletas de 50 gramos cada una que, por ahora, sólo se venden en Cacao de Origen en Los Secaderos de La Trinidad, en Licores Mundiales, en La casa del Habano en Las Mercedes y Epicur Cigar en El Rosal. Su Instagram es @Varinaspurove
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